En una gran cantidad de empresas ya se han estado emitiendo CFDI bajo la version 3.3, esto para que a la entrada en vigor de dicha versión, no les cause mayores conflictos; por lo que han llegado a realizar ciertas modificaciones a su control interno.
NECESARIOS O INNECESARIOS LOS CAMBIOS EN EL CONTROL INTERNO A PARTIR DEL CFDI VERSION 3.3
Con la entrada en vigor de la nueva versión para la emisión de los CFDI pareciera que la inquietud y hasta la ansiedad se han disparado, y no es de menos ya que al no emitir un comprobante fiscal como la autoridad lo requiere puede llevarnos a la no deducibilidad de erogaciones necesarias para la generación de los ingresos; lo que nos hace preguntarnos ¿será necesario modificar o cambiar el control interno del negocio con una nueva forma de facturar?.
Sería muy aventurado afirmar o negar tal situación, en este caso sería analizar que tanto se relaciona o afecta la nueva forma de facturación con la forma de llevar el control, administración y contabilidad en el negocio, ya que la facturación es materia fiscal; lo cual significa que al emitir un CFDI se deberán cubrir nuevos requisitos solicitados por la autoridad hacendaría para su deducibilidad; requisitos que, pocos o muchos se han venido cubriendo desde las facturas impresas, sin tener que modificar a causa de estas, los sistemas o controles internos del negocio, que sí se han adaptado para cumplir con las obligaciones fiscales, es algo diferente.
Comprobantes fiscales en la version 3.3
Se puede entender lo siguiente, generalmente en todo negocio o empresa, se manejan anticipos, ventas a crédito, pagos de nómina, envíos de mercancías, etc., movimientos por los cuales se manejan recibos, notas, facturas, entre otros documentos, y también es cierto que la mayoría de estos movimientos, si no es que todos, se reflejan en cuentas bancarias, las cuales, podría decirse que desde 2014 son la principal fuente fiscalizadora, por lo que hacienda, lamentablemente, ha implementado tantos cambios hasta llegar a la v3.3 con la que se tendrán que emitir tantos comprobantes sean necesarios como movimientos se realicen, ya que estos ampararán a cada uno; lo que podría significar que, las operaciones que ya se vienen realizando dentro del negocio solo se plasmarán en los ya tan mencionados comprobantes fiscales, sobre los que tendrá conocimiento y en su poder la autoridad fiscal, un ejemplo de esto es el control que se lleva en las cuentas por cobrar, que irán muy de la mano con los CFDI con complemento para pagos.
De lo anterior se observa que el control interno de la empresa, no debiera verse afectado, pero si se pudiera adaptar quizá a un mayor control, si fuera necesario, pero al final de todo esto, será decisión de cada negocio, si cambia o no sus controles.