En la Norma de Información Financiera C-6, se encuentran los conceptos que se deben considerar para cuando se trata de determinar la depreciación de los componentes o activo fijo, lo cual forma parte importante de todo tipo empresa, sin importar su tamaño.
Para conocer mas a detalle la forma en que debemos registrar en la contabilidad, un activo de este tipo, siempre es primordial conocer que conceptos intervienen en el cálculo.
Qué es la depreciación
La depreciación tiene como objetivo distribuir de forma sistemática y razonable el costo de adquisición de un componente o activo fijo, menos su valor residual, entre la vida útil estimada de dicho componente, por lo que la NIF C-6 señala que es un proceso de distribución y no de valuación.
Qué es el monto depreciable
El monto depreciable es la parte que, una vez que se ha determinado y distribuido el costo de adquisición que corresponde al activo (menos su valor residual), se deberá ir asignando a resultados, sistemáticamente, a lo largo de la vida útil del mismo.
Inicio y final del periodo de depreciación
El periodo de depreciación iniciará en la fecha en la que el componente o activo fijo, se encuentre en la situación ya disponible para su utilización, es decir, ubicado y bajo las condiciones necesarias para comenzar a operar.
Para detener al proceso de depreciación, habrá de considerarse dos momentos, que será aquel de la fecha más temprana, entre:
- Cuando el componente o activo fijo se destine a ser vendido, y
- La fecha en que se produzca su baja
Cuando un componente se encuentre sin utilizar, por causas ajenas a las mencionadas, su depreciación debe continuar con su curso normal, a menos de que ya se haya depreciado en su totalidad. Ahora bien, si el activo se va depreciando en función de la actividad, entonces el cargo por depreciación que corresponda deberá ser nulo.
Vida útil
Como es sabido, la vida útil es el periodo durante el cual, la empresa o la entidad espera obtener beneficios económicos futuros; sin embargo, para determinar la vida útil es importante que dicha entidad considere ciertos factores que podrían disminuir este periodo, por ejemplo:
- Utilización prevista del activo
- Desgaste físico
- Obsolescencia técnica
- Límites legales o restricciones sobre el uso
En la mayoría de los casos, es la entidad la que determina la vida útil, atendiendo a sus propias políticas.
Los métodos de depreciación de acuerdo a la NIF C-6
Para elegir el mejor método de depreciación, la entidad deberá analizar cuál es el que más le conviene dependiendo su actividad y considerando el tipo de componente o activo fijo, así también la forma en que espera obtener los beneficios económicos futuros y principalmente, el método que enfrente de la mejor manera los ingresos con los costos y gastos correspondientes.
La norma contable menciona los siguientes métodos:
Métodos de actividad
- Método de unidades producidas o de uso
- Método de horas trabajadas
Método de línea recta
Métodos de cargos decrecientes
- Método de suma de números dígitos
- Método de saldos decrecientes
Métodos de depreciación especial
- Métodos de grupo y compuesto
- Métodos híbridos o de combinación
Deducción de inversión no es sinónimo de depreciación
Por último, cabe mencionar que a pesar de que la norma contable hace referencia a la “depreciación en ley”, lo que se menciona en las disposiciones no se refiere propiamente a una depreciación, sino a una deducción de inversiones, ya que este ultimo concepto no define o determina la vida útil de un bien.
Por alguna razón los bienes se encuentran totalmente depreciados en la contabilidad, pero aún tienen un uso (mayormente mobiliario), en este caso qué es lo más correcto ¿Aplicar revaluación y extender la vida útil?
debes de hacer un análisis de la vida útil del bien y depreciarlo según sea necesario el 10% que todos conocemos para mobiliario es una tasa fiscal no financiera, por tanto el estudio de la vida útil de tus activos