Siempre que se inicia un negocio, se inicia en pequeño, regularmente, pero siempre con la firme intención de que este crezca, que aumenten las ventas, que se contraten más empleados, abrir sucursales quizás, etc.; pero lo que hoy en día no puede faltar en un negocio o al menos en la mayoría, es una terminal punto de venta, con la cual se puedan recibir pagos con tarjetas bancarias.
Consideraciones a tomar en cuenta si se quieren recibir pagos con tarjetas bancarias
Uno de los requisitos de deducibilidad tiene que ver precisamente con los pagos con tarjeta al momento de adquirir bienes o servicios, los cuales están topados.
Ahora bien, volviendo al hecho de iniciar con una terminal, existen algunos puntos que se deben considerar antes de adquirir el compromiso de la misma, por ejemplo:
Se recomienda solicitar toda la información posible en los bancos para conocer principalmente los siguientes detalles:
- Tipo de cuenta bancaria que se abrirá o se utilizará para el negocio
- el costo anual de la cuenta, si la hay
- las tasas que cobre el banco por concepto de comisiones ya sea por manejo de cuenta o por las operaciones que se realicen (cobros con tarjeta).
- Si son las mismas tasas por operaciones con tarjetas de débito que de crédito, y de cuanto
- Costo por la contratación de la terminal bancaria como los gastos de instalación, por la renta mensual, si hay cobertura, tipo de terminal que se necesita o conviene, especificaciones técnicas, etc.
- Si existe alguna capacitación en el uso de la terminal.
Puntos a considerar
Una vez que se cuente con al menos la información descrita líneas arriba, entonces se pueden hacer las comparaciones necesarias para saber qué es lo que más conviene al negocio que se inicia, tomando como base los ingresos que se perciben y los que se pretenden percibir, así como los gastos que ya se vienen realizando, porque una vez realizada la contratación de la terminal los gastos mensuales aumentarán, sin embargo lo que no se debe perder, es la intención de que dicho negocio crezca cada vez más.
Ahora bien, para cuando se acuda a la institución bancaria, por la que se haya decidido, ya se debe estar registrado ante el RFC (Registro Federal de Contribuyentes), recordemos que se trata de la recepción y resguardo de los ingresos del negocio, y por los cuales se tendrán que pagar los impuestos correspondientes, no olvidemos que ya todo va de la mano fiscalizadora de Hacienda.
