Todos, o al menos la mayoría, hemos acudido a la excelente ayuda del SAT, tanto por teléfono como por chat. Pero, ¿no te ha pasado que si la ayuda la pides para una persona moral, simplemente no te atiende, o si te atienden, solo te responden puras banalidades sin sentido? Bien, esta es la razón.
Si no has notado este detalle del SAT, quizá es porque, o no has pedido ayuda, o eres persona física. Pero curiosamente, y si eres fijado, notarás que cuando alguien que representa a una persona moral pide ayuda en la
página del SAT (más concretamente vía chat), la atención deja mucho a desear. En ocasiones incluso dan asesoría errónea y fuera de toda lógica humana.
Entonces, ¿por qué ocurre que en el SAT no ayudan a las personas morales?
Esta pregunta es algo complicado de responder, pero básicamente se debe 2 razones:
- En el SAT se tiene la obligación total de ayudar y brindar el mejor servicio a las personas físicas que a las morales
- Se presume que una sociedad mercantil como lo es una persona moral, tiene la capacidad suficiente, en recursos y personal, para contratar a un Contador Público y que este se encargue de la parte fiscal de la empresa.
Pareciera que es una verdadera grosería, pero es una realidad. He encontrado testimonios en donde a los trabajadores del SAT que atienden a los contribuyentes vía chat, son regañados por atender a personas morales, dando como principal excusa que las personas morales tienen la capacidad suficiente de contratar a un Contador Público.
Esto no es para nada agradable, pues pese a la capacidad que sí deberían tener, existen muchas otras cuestiones que se escapan de los Contadores y que no necesariamente pertenecen al área contable-fiscal, y muchas veces son los problemas técnicos que sufren la página, o los programas o sistemas. Entonces, ¿qué opciones tenemos cuando el SAT tiene implementado esta clase de políticas en donde las personas morales tienen restringida la ayuda? Definitivamente no queda más que estar preparados, pues al final, el SAT no está tan equivocado cuando asume que una persona moral tiene la capacidad suficiente de contratar a un contador público.
¿Te ha pasado que el SAT no te ayuda como debería de ser?
Incluso cuando uno asiste a pláticas informativas al SAT los expositores primero preguntan quienes son Contadores, si nadie levanta la mano empiezan a hacer comentarios poco profesionales de nosotros.