Trabajar horas extras: lo bueno y lo malo

Trabajar horas extras nunca será un buen indicio. En estos días, todo lo que se necesita para cubrir las necesidades mas básicas, tiene un precio que a veces es muy difícil cubrir, ese sueldo que se percibe y que tanto esfuerzo cuesta obtenerlo, ya no alcanza, debido a esto es que una gran parte de la clase trabajadora opta por quedarse mas tiempo en su lugar laboral, si no queda de otra que trabajar horas extras.

Pero, que implica trabajar horas extras:

Primero, en el área administrativa se debe tener la certeza de que el patrón o la persona a cargo autorizó que el trabajador laborará horas extras, esto es para mayor seguridad tanto del patrón como del trabajador, ya que puede darse el caso de que el trabajador decida quedarse a laborar más tiempo, y cuando llegue el momento de su pago exija que se le remuneren las horas extras trabajadas, y si el patrón no se enteró, podría tener problemas, ahora en caso contrario, sería si el patrón le exige que trabaje de más, pero no acordaron nada sobre dicha remuneración. Entonces para evitarse este tipo de inconvenientes, lo más recomendable es que conste por escrito el hecho de trabajar horas extras, que ambos tengan conocimiento y estén de acuerdo, (articulo 31 de la Ley Federal del Trabajo).

Y segundo, el personal administrativo que tenga a su cargo el control de nominas, deberá tener conocimiento sobre el manejo y cálculo de las horas extras, los cuales están regulados en los siguientes artículos de la misma ley:

Artículo 66.- Podrá también prolongarse la jornada de trabajo por circunstancias extraordinarias, sin exceder nunca de tres horas diarias ni de tres veces en una semana.

Artículo 67.-  (ultimo párrafo)

Las horas de trabajo extraordinario se pagarán con un ciento por ciento más del salario que corresponda a las horas de la jornada.

 Artículo 68.- Los trabajadores no están obligados a prestar sus servicios por un tiempo mayor del permitido de este capítulo.

La prolongación del tiempo extraordinario que exceda de nueve horas a la semana, obliga al patrón a pagar al trabajador el tiempo excedente con un doscientos por ciento más del salario que corresponda a las horas de la jornada, sin perjuicio de las sanciones establecidas en esta Ley.

Sobre esto, varias empresas han tenido dudas en cuanto al calculo de horas extras o tiempo extraordinario, así que esta es una de las razones por las cuales la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) en el 2013, aclara que el pago de tiempo extraordinario será de la siguiente forma: sí, el patrón puede exigir que se prolongue la jornada hasta tres horas más, pero no más de tres días a la semana, que es lo permitido en esta ley (art. 68, primer párrafo), y deberá pagársele a su trabajador el doble por hora, pero si el trabajador amplia su tiempo extraordinario, es decir, más de las nueve horas permitidas, estas se tendrán que pagar al triple. Y no solo esto debe tener en cuenta la administración, sino que debe organizarse para que a la hora de los pagos no surjan inconvenientes.

Así que para una mejor organización, tanto para el trabajador como para el área administrativa, el que un trabajador, o varios más, se quede a laborar tiempo extra, implica el tener que implementar algunos sistemas de control dentro del área de recursos humanos, con los cuales se permita, por ejemplo:

• Saber quienes cubrirán tiempo extraordinario.
• Cual es la hora de término de la jornada normal, para determinar un tiempo libre entre el término y el inicio del tiempo extraordinario.
• Implementar un sistema para el conteo de horas laboradas por empleado así como el pago de estas.
• Por cuanto tiempo cubrirán horas extras.
• Determinar una persona a cargo del control del tiempo extraordinario, para un mejor manejo de este.

Aspectos organizacionales de horas extras

Cualquier pensaría que laborar horas extras es necesario para sacar el trabajo, lo cual es un argumento válido. Cuando esto ocurre en las empresas y trabajos una vez al mes, o incluso una vez cada dos semanas, es normal. Sin embargo, el hecho de que ocurra de manera constante, que sea rutinario y todos los días el trabajador deba quedarse horas extras, es indicio inequívoco de que hay una deficiencia.

• Si laboras tiempo extra es porque no eres eficiente en tu trabajo.
• Si laboras tiempo extra es porque está mal planeado el puesto de trabajo y la carga es excesiva.

En ambos enunciados existe una deficiencia. Laborar horas extras nunca será un buen indicio. Nunca.

Hoy en día existen muchos jefes y patrones que para ellos, el sinónimo de compromiso y tener la camiseta puesta es quedarse horas extras, y porque todos se están comprometiendo y quedando tiempo de más, tú también debes de hacerlo. Eso es un pensamiento retrogrado; el clásico pensamiento del jefe capataz.

El trabajo nunca va a terminar, siempre existirá y siempre habrá algo por hacer, así que no hay un motivo real para quedarse horas extras en el trabajo, pero si te tocó la mala fortuna de pertenecer a una organización que te exige esto, al menos exige bien tus derechos.

Con colaboración de Cervantes